Estudio realizado en 85 pacientes: 58% de las personas con Parkinson percibieron deterioro de su salud mental en pandemia

Precisamente para identificar los principales impactos de la pandemia en la salud de las personas con esta enfermedad, CENPAR- centro clínico neurológico especializado en el tratamiento del Parkinson, realizó un estudio a 85 de sus pacientes, la mayoría sobre 50 años y con más de cinco años de diagnóstico.
‘El quedarnos en casa, provocó en las personas con Enfermedad de Parkinson un cambio en la rutina cotidiana, limitando sus actividades de esparcimiento y disminuyendo la oportunidad de asistir a sus controles médicos y continuar con su proceso de rehabilitación. Eso lo vimos en el estudio, donde un 48% de los consultados señaló verse obligado a realizar cuarentenas obligatorias o preventivas y un 75% que debió dejar de realizar sus actividades habituales’, explica el doctor Roque Villagra, neurólogo y Director Médico de CENPAR.
Los efectos en la salud mental
Respecto de las repercusiones en la salud mental, un 58% de los pacientes percibió un empeoramiento en este ámbito, un 55% reveló que se sintió ‘angustiado, abrumado o temeroso’ y un 48% que se sintió ‘solo’ durante el periodo más duro de confinamiento.
‘Durante la pandemia pudimos observar en forma muy importante que la salud mental era uno de los aspectos más dañados. Con el aislamiento, la soledad y las restricciones de movilidad, muchos de nuestros pacientes al perder su red social, retrocedieron en lo motor, pero sobre todo en lo anímico’, explica el neurólogo.
En tanto, el 54% sintió que había experimentado un deterioro cognitivo, lo que, según el especialista, se pudo evidenciar a través de las consultas en señales como la falta de concentración y alteraciones de la memoria.
Daño en la salud física y rehabilitación
En término de la continuidad de los tratamientos, un 66% de los pacientes consultados mantuvo actividades de rehabilitación; el 85% mantuvo contacto con profesionales de la salud a través de manera presencial o de telemedicina, e indicó que esto le ayudó a sobrellevar el período de confinamiento.
Pese a esta continuidad, la encuesta arrojó que el 70% de los pacientes consultados percibió que su salud física se deterioró en la pandemia.
‘Los pacientes en confinamiento constante sufren el riesgo de perder masa muscular y tener menos equilibrio. En ese sentido, los procesos de rehabilitación se hicieron y se harán urgentes para que el paciente vuelva a recuperar su funcionalidad anterior’, reflexiona el doctor Roque Villagra. ‘Nuestra impresión es que como país contrajimos una deuda enorme con este grupo de pacientes, cuyo tratamiento deberá recoger las secuelas dejadas por la pandemia, y apoyarse en instrumentos como la telemedicina para llegar a los lugares más apartados y ayudar así a mejorar la calidad de las personas y su grupo familiar’, finaliza.